En Tartaréu nos sentimos como en nuestra propia casa. Estamos cazando allí desde hace más de 30 años. Hemos visto crecer a Miguelet y a los hermanos Corsa Cambre, los «Romanillos». Hemos disfrutado de cacerías impresionantes y, hemos llorado la muerte de nuestro entrañable compañero y amigo Miguel Valls Camping, que se produjo el día 12 de febrero de 2011.
Tartarèu es para nosotros algo más que un coto de caza. Sus habitantes nos conocen y nos reciben estupendamente. Sus parajes nos resultan muy entrañables. Hemos conseguido entrar en el tejido social de este pueblo tan especial y nos sentimos bien acogidos.
Ton «El Romano, Ilustre lugareño.
Jaume Corsa, uno de los «Romanillos», a quién hemos visto crecer.
En Tartaréu seguiremos disfrutando, de la caza, de su entorno, de sus habitantes y de las comidas.